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🌆 Tashkent: tradición y modernidad en el corazón de Uzbekistán

Tashkent es la capital viva de Uzbekistán: avenidas modernas, arquitectura soviética monumental, bazares históricos, metro artístico, mezquitas antiguas y una escena cultural muy activa. Esta guía te ayudará a organizar tu visita: qué ver en Tashkent, cómo moverte, dónde comer, seguridad, historia y experiencias reales que hacen de esta ciudad una parada imprescindible en cualquier viaje a Uzbekistán.

Vista panorámica de Tashkent, capital de Uzbekistán

1. Tours recomendados en Tashkent

Recorrido guiado por el casco antiguo de Tashkent

Los tours en Tashkent combinan el lado histórico y el lado contemporáneo de la capital de Uzbekistán. En un solo día puedes pasar del bazar Chorsu, con especias, panes tradicionales y frutas secas, al complejo religioso de Khast-Imam, donde se conservan manuscritos sagrados del islam y antiguas madrasas.

Un paseo guiado también suele incluir el Metro de Tashkent, famoso por sus estaciones decoradas con mármol, mosaicos y lámparas monumentales; y plazas simbólicas como la Plaza Amir Timur. Este tipo de visita es ideal si es tu primera vez en Asia Central y quieres situarte culturalmente antes de continuar el viaje hacia Samarcanda o Bujará.

Consejo práctico: reserva al inicio del viaje un recorrido cultural a pie o en coche con guía local. Te da contexto histórico, recomendaciones gastronómicas y trucos logísticos (cambio de dinero, apps de taxi, horarios del metro) que te servirán para todo tu viaje a Uzbekistán.

2. Historia de Tashkent

Arquitectura histórica en Tashkent, Uzbekistán

Tashkent es una de las ciudades más antiguas de Asia Central y un punto estratégico de la Ruta de la Seda. En fuentes históricas aparece con nombres como Chach, Shash o Tashkent, y su historia se remonta a más de dos mil años.

A lo largo de los siglos formó parte de reinos túrquicos, del mundo persa, del entorno timúrida y más tarde del Imperio ruso en el siglo XIX. Después fue capital de la república soviética de Uzbekistán y, tras la independencia, se convirtió en la capital de la República de Uzbekistán.

Este pasado múltiple explica la mezcla visual de la ciudad: mezquitas y madrasas tradicionales, bloques soviéticos monumentales, amplias avenidas de inspiración socialista y nuevos rascacielos de cristal y centros comerciales.

Para entender bien la evolución histórica y religiosa, muchos viajeros visitan el complejo espiritual de Khast-Imam, el Museo de Artes Aplicadas y el Museo Estatal de Historia, donde se ve claramente cómo Tashkent pasó de ser una ciudad caravanera a una metrópolis moderna.

3. Qué ver y qué hacer en Tashkent

Bazar Chorsu y cúpulas azules en Tashkent

Las visitas imprescindibles para cualquier viajero que quiere conocer Tashkent y la cultura uzbeka empiezan en el bazar Chorsu, corazón del casco antiguo. Aquí verás panes tradicionales horneados en horno de barro, montañas de especias y una vida local auténtica.

Muy cerca está el complejo de Khast-Imam, con madrasas, mezquitas y bibliotecas que guardan manuscritos islámicos antiguos. Es uno de los lugares más importantes del turismo religioso en Uzbekistán.

Otro punto único es el Metro de Tashkent. Cada estación tiene su propio diseño artístico: mármol, mosaico, candelabros. Es transporte público y museo a la vez.

Si buscas iconos urbanos modernos, pásate por la Plaza Amir Timur, rodeada de edificios administrativos, jardines y esculturas ecuestres; y por el Museo de Artes Aplicadas, que presenta cerámica, textiles, tallas de madera y bordados típicos de Uzbekistán.

A las afueras, el Mausoleo de Zangiata es un lugar espiritual muy visitado por peregrinos locales y un ejemplo precioso del turismo cultural y religioso que puedes vivir sin salir de Tashkent.

4. Parques, ocio y compras

Parque urbano y noria en Tashkent

Una de las sorpresas de Tashkent es lo verde que es. Parques como EcoPark o el Parque Central son perfectos para caminar, hacer yoga al aire libre o simplemente descansar bajo la sombra en verano.

Si viajas en familia o quieres vistas panorámicas, ve a Ankhor Lokomotiv, donde está la noria más alta del país. Ideal al atardecer.

Para ir de compras, tienes dos mundos: los bazares tradicionales (Chorsu, Alay) y los centros comerciales modernos (Samarkand Darvoza, Mega Planet, Next). En un mismo día puedes comprar especias locales y, una hora después, ropa internacional.

Esta mezcla de ocio urbano, tradición viva y consumo moderno es una de las razones por las que muchos viajeros consideran Tashkent una ciudad muy cómoda para pasar varios días dentro de un viaje a Uzbekistán.

5. Qué comer en Tashkent

Plov tradicional uzbeko servido en Tashkent

Comer en Tashkent es descubrir la gastronomía uzbeka: platos potentes, sabrosos y compartidos. No te puedes ir sin probar: plov (arroz con cordero y zanahoria), lagman (fideos con verduras y carne), shurpa (sopa tradicional), y samsa (empanadas horneadas en horno tandoor).

Un lugar mítico es el Centro del Plov (Osh Markazi), donde se cocina plov en enormes calderos de hierro. También hay chaikhanas (casas de té) clásicas que sirven pan fresco, ensaladas locales y parrilla de cordero.

Al mismo tiempo, Tashkent tiene cada vez más cafeterías modernas con café de especialidad, bollería artesanal y repostería inspirada en Europa y Turquía. Esa parte cosmopolita encanta a viajeros jóvenes y a mochileros que hacen turismo juvenil en Uzbekistán.

6. Transporte público en Tashkent

Estación de metro histórica de Tashkent

Moverse por Tashkent es relativamente fácil. El metro de Tashkent funciona desde 1977 y es rápido, barato y seguro. Además del metro, existen buses y trolebuses que cubren prácticamente toda la ciudad.

Para distancias cortas o nocturnas puedes usar taxis por app (similares a Uber), como servicios tipo Yandex o taxis locales, que son muy económicos en comparación con Europa.

En las zonas más céntricas empiezan a verse patinetes eléctricos y bicis urbanas de alquiler, algo que gusta mucho a viajeros jóvenes.

7. Cómo llegar a Tashkent

Aeropuerto Internacional de Tashkent, Uzbekistán

La forma más directa de entrar en Uzbekistán es volando al Aeropuerto Internacional de Tashkent, que conecta con ciudades como Estambul, Dubái, Moscú, París o Seúl. Para muchos viajeros internacionales, Tashkent es la puerta de entrada.

Si ya estás dentro del país, puedes llegar en tren de alta velocidad Afrosiyob desde Samarcanda, Bujará o incluso vía Urgench (para visitar Jiva).

También existen rutas por carretera y buses regionales que conectan Tashkent con otras zonas de Asia Central, lo cual es útil para viajeros con más tiempo o para quienes hacen ruta terrestre.

8. Idioma y moneda

Som uzbeko, moneda local en Uzbekistán

El idioma oficial es el uzbeko, pero el ruso sigue siendo muy utilizado en la vida diaria. En zonas turísticas y en hoteles es cada vez más común encontrar personal que habla inglés básico, sobre todo en Tashkent.

La moneda local es el sum uzbeko (UZS). Conviene cambiar dinero en bancos o casas de cambio oficiales. En centros comerciales y hoteles suele aceptarse tarjeta, pero para bazares, taxis y compras pequeñas, lleva efectivo.

Consejo: guarda los recibos del cambio de divisa. Te pueden servir si quieres cambiar de vuelta antes de salir del país.

9. Seguridad en Tashkent

Centro de Tashkent de noche, ambiente tranquilo

Tashkent es considerada una ciudad segura para el viajero internacional. Hay presencia policial en áreas públicas, estaciones y plazas principales, lo que genera una buena sensación de control y orden.

Aun así, aplica sentido común: cuida tus objetos personales en zonas muy concurridas como el bazar Chorsu, evita calles mal iluminadas altas horas de la noche y lleva siempre una copia del pasaporte (es normal que la policía pueda pedir identificación en Uzbekistán).

Para muchas personas que hacen su primer viaje a Uzbekistán, la seguridad general en Tashkent es una sorpresa muy positiva.

💡 Conclusión

Tashkent no es solo la capital administrativa de Uzbekistán. Es una puerta de entrada cultural a Asia Central: bazares vivos, mezquitas históricas, metro artístico, parques verdes y cafés modernos.

Desde aquí puedes continuar hacia Samarcanda, Bujará y Jiva, las joyas de la Ruta de la Seda. Pero Tashkent merece tiempo propio. Es presente, no solo pasado.

✨ Explorar Tashkent es entender Uzbekistán tal y como es hoy.